"He constatado la voluntad común de todas las comunidades autónomas de participar en este sistema y el acuerdo básico sobre sus principios, aunque con matices", declaró Caldera al término de la reunión.

Partiendo de ahí, continuó el ministro, el Sistema de la Dependencia estará garantizado plenamente en todo el territorio nacional y comenzará a funcionar el 1 de enero de 2007.

Anunció que, antes de que este texto pase al Parlamento, habrá otra conferencia de Servicios Sociales que sirva para recoger las opiniones y sugerencias de las autonomías con respecto al Sistema Nacional de Dependencia.

En cuanto al sistema de financiación, que según el actual anteproyecto asumirán conjuntamente el Estado y las comunidades autónomas con la colaboración de los usuarios, Caldera aseguró que ha sido bien recibido por los responsables regionales, "que no se han opuesto a la cooperación financiera".

En esta linea, el titular de Trabajo y Asuntos Sociales añadió que se ha acordado que los convenios que el Estado pretende firmar con las comunidades para establecer la financiación de cada región podrán ser plurianuales, y no sólo anuales, como se preveía hasta ahora.

Se ha tranquilizado también a las comunidades, puntualizó el ministro, al asegurarles que los usuarios del sistema que no dispongan de recursos suficientes no deberán hacer aportaciones económicas para beneficiarse de él. "La persona que no tenga recursos no paga", aseguró.