Este descenso es atriuido por las cajas rurales a la aportación de 4.000 millones de pesetas al nuevo fondo estadístico de cobertura de insolvencias, obligado por las últimas exigencias del Banco de España sobre el tratamiento de posibles insolventes.

Según informó hoy el Grupo Caja Rural, a pesar de este resultado, se mantiene un crecimiento "muy positivo" en todos los márgenes. Así, creció un 15,7% el margen de explotación y un 15,2% el de intermediación.

Los activos totales del grupo superan los 5 billones de peseas (30.000 millones de euros), los que supone un 11,7% más que el año anterior.