APRAMP atiende diariamente a una media de 280 mujeres prostituidas a través de su unidad móvil, otro de los servicios de esta ONG apoyados por Obra Social Caja Madrid.

Según informó hoy la entidad financiera, las mujeres senegalesas, guineanas y nigerianas son los tres principales grupos que se dedican a la prostitución en Madrid, siendo las nigerianas casi en su totalidad víctimas de trata con fines de explotación sexual.

Asimismo, como en el caso de subsaharianas, la presencia de mujeres del Este se debe mayoritariamente a la trata con fines de explotación sexual.

BAJO NIVEL CULTURAL

Los colectivos latinoamericanos son los más diversificados, ya que existen franjas de edad desde los 16 hasta los 35 años en las que dominicanas, cubanas, brasileñas, colombianas y ecuatorianas ejercen en todo tipo de sectores.

La mayoría de las mujeres que abandonan la prostitución se integran en el sector limpieza, servicio domiciliario y hostelería, según Caja Madrid.

Según la coordinadora de APRAMP, Rocío Mora, "muchas de las mujeres a las que atienden en busca de una segunda oportunidad no saben hablar español, tienen un nivel cultural bajo y unas costumbres tan diferentes a las de nuestro país que hacen muy difícil su integración".

Por este motivo, los programas de reinserción desarrollados por ambas entidades se llevan a cabo en tres niveles: formación básica (alfabetización, graduado escolar, temas monográficos, etc.), formación prelaboral (adquisición de los hábitos necesarios para el trabajo y la producción) y capacitación para el empleo (cursos especializados de informática, artesanía, reciclado de tonner, jardinería...).