La Caixa no ofreció la cantidad suficiente para adquirir el terreno. Pujó en la subasta por más de 1.200 millones de pesetas, pero la cantidad mínima debía ser 2.030 millones, ya que es esta la deuda actual de Prima Inmobiliaria, la entidad propietaria de los terrenos.

Los 2.030 millones de deuda son la suma de los préstamos que la empresa debe a La Caixa, las aportaciones pendientes al plan de urbanización de la zona e impuestos municipales y estatales.

La firm Prima Inmobiliaria tiene ahora un plazo de nueve días para buscar otra oferta que supere a la de La Caixa, antes que el banco tenga la propiedad definitiva.

Los casi 140.000 metros cuadrados por los que pujó La Caixa forman parte de la urbanización de la avenida de Francia de Valencia. Uno de los proyectos de expansión más importantes de la ciudad.