Cahner, que es el portavoz de la comiión gestora de AC, indicó que los contactos con Esquerra para poder ir conjuntamente a los comicios europeos son "fructíferos". ERC se presenta a estas elecciones dentro de la candidatura Europa de las Naciones, con Eusko Alkartasuna (EA) y los Nacionalistas de Ibiza (ENE).

Acció Catalana condiciona la participación de Max Cahner en esta lista a que se respete la identidad del nuevo partido, que se incorpore algún otro militante del mismo y que exista un acuerdo entre las dos formaciones en relación a programa y la campaña electoral.

El portavoz de AC presentó el nuevo partido como "nacionalista", "progresista" y de centro, así como defensor de la autodeterminación de Cataluña. Según dijo, el partido nace con vocación de no servir a una clase determinada.

Entre los objetivos de Acció Catalana se encuentra regenerar la política y defender el mismo proyecto, aunque modernizado, de la antigua Acció Catalana, creada en 1922 tras la política regionalista de Francesc Cambó.

A pesar de que Cahnr dijo que no es comparable aquella situación histórica con la actual, admitió que puede existir cierto paralelismo entre la política que hizo Cambó y la de Miquel Roca, secretario general de Convergència.

Para el portavoz de Acció Catalana, Convergència "no hace público" si ha renunciado a la soberanía de Cataluña, aunque indicó que en este partido hay "nacionalistas convencidos y consecuentes".

Cahner dijo que AC ya ha recibido unas 340 solicitudes de militantes y que algunos de ellos proceden e otras fuerzas políticas, tanto del PSC como de CDC, en la misma proporción. Entre los aspirantes a formar parte de la nueva formación se encuentran profesores universitarios (30 por ciento), estudiantes (20 por ciento) y profesionales liberales (50 por ciento).

El portavoz de Acció Catalana hizo un llamamiento al movimiento asociativo de Cataluña a adherirse al proyecto y anunció la celebración del primer congreso del partido para el mes de octubre.