Caffarel le dice en la misiva que sus "lamentables e infundadas" declaraciones "constituyen una falsedad y una grave ofensa para todos los empleados de esta Casa que me honro en dirigir".

"Desde que estoy aquí, hace casi dos años, te puedo asegurar que en RTVE se lleva a cabo una gestión empresarial absolutamente honesta y transparente. Son, por tanto, las tuyas unas afirmaciones tan graves y tan injustificadas que mañana mismo propondré al Consejo de Administración del Ente Público que haga una declaración formal de rechazo a tus desafortunadas palabras".

La directora agrega que el hecho de que RTVE precise una profunda reforma en la que se trabaja intensamente desde hace meses "no significa que sea una empresa corrupta".

"Si conoces algún caso concreto, debes denunciarlo con claridad y no de la forma en que lo has hecho, lanzando equívocas y confusas generalizaciones. En nombre propio, y de todos los profesionales que trabajan y han trabajado en RTVE, te quiero reiterar mi profundo malestar por el contenido de tus lamentables e infundadas acusaciones", acaba la carta.