Esta memoria recoge los datos sobre juego gestionados por el sector privado (casinos, salas de bingo, máquinas tragaperras), que ingresó 1.871.781 millones de pesetas; el sector público (lotería nacional, primitiva, bono-loto y quiniela de fútbol), que recaudó 911.580 millones de pesetas, y l cupón de la ONCE, que obtuvo 386.059 millones de pesetas.

De las 80.372 pesetas que se gasta cada español en el juego, 27.923 van a parar a las máquinas tragaperras, 15.527 a bingos, 14.289 a la Lotería Nacional, 9.790 al cupón de la ONCE, 5.861 a la Lotería Primitiva, 4.016 a casinos y 1.786 a quinielas.

El informe de la Comisión Nacional del Juego señala que las cantidades jugadas en el conjunto de los juegos ha disminuido desde 1992 a 1996 (un 0'46 por ciento), destacando la constante pérdid de mercado de los juegos privados (descienden un 11'3 por ciento) en favor de los juegos públicos (20'83 por ciento) y del cupón de la ONCE (20'48 por ciento).

Comparando los datos de 1995 y 1996, existe un incremento del 2'28 por ciento de los ingresos de las máquinas tragaperras. Para evitar el abuso de utilización de estas máquinas, la Secretaría General Técnica del Ministerio de Interior ha elaborado un proyecto de Reglamento de Máquinas Recreativas y de Azar, que actualiza los requisitos técnico y prohibe todo tipo de incentivos o enganches al juego que hagan que un juegador juegue más de lo tenía pensado".