Medio ambiente

Cada año se destruyen 10 millones de hectáreas de bosques, según la ONU

- Hoy se celebra el Día Internacional de los Bosques

MADRID
SERVIMEDIA

El secretario general de la ONU, António Guterres, señala que alrededor de 10 millones de hectáreas de bosques se degradan y destruyen cada año, pese a que estos ecosistemas son esenciales para las personas y el planeta. Esa superficie es algo superior a la extensión de Castilla y León.

Guterres hace estas consideraciones en un mensaje con motivo del Día Internacional de los Bosques, que se celebra este lunes, y que Naciones Unidas conmemora bajo el lema 'Bosques: consumo y producción sostenibles' como llamamiento para elegir "madera sostenible para las personas y el planeta".

En su mensaje, recogido por Servimedia, Guterres apunta que "los bosques actúan como filtros naturales, proporcionan aire y agua limpios, y son refugios para la diversidad biológica". "Ayudan a regular el clima, ya que influyen en el régimen pluviométrico, enfrían las zonas urbanas y absorben un tercio de las emisiones de gases de efecto invernadero. Proporcionan medios de vida, medicinas, sustento y refugio a muchas comunidades y pueblos indígenas", añade.

Guterres indica que "las promesas de detener la deforestación han sido altas y claras, y en algunas regiones se está frenando la deforestación", pero lamenta: "Sin embargo, cada año seguimos degradando y destruyendo unos 10 millones de hectáreas de bosques. Es esencial que el mundo aplique la reciente Declaración de los Dirigentes reunidos en Glasgow sobre los Bosques y el Uso de la Tierra y otros instrumentos diseñados para proteger nuestros bosques".

No obstante, los bosques albergan más del 80% de las especies animales y vegetales, y más de 1.600 millones de personas dependen de ellos para sobrevivir proporcionándoles alimentos, medicinas, combustible y abrigo.

Los bosques cubren un 31% de la superficie terrestre del mundo, almacenan una cantidad de carbono estimada en 296 gigatoneladas y albergan la mayor parte de la biodiversidad terrestre del mundo, según la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura).

Esta agencia de la ONU apunta que los bosques son una fuente de fibra, combustible, alimentos y forrajes, y proporcionan medios de vida a millones de personas, lo que incluye a muchas de las personas más pobres del mundo. Por ejemplo, cerca de 2.400 millones de personas emplean la dendroenergía para cocinar.

Adicionalmente, los bosques contribuyen a mitigar el cambio climático y a mejorar la calidad del suelo, el aire y el agua. Si se gestionan de forma sostenible, también son una fuente de materias primas renovables.

DEFORESTACIÓN

Con motivo del Día Internacional de los Bosques, Ecologistas en Acción difundió este lunes un nuevo informe de Harvest y Rainforest Foundation Norway, donde se analizan en profundidad 25 áreas críticas de la sabana de El Cerrado (Brasil) y su tendencia creciente de deforestación.

El Cerrado y sus áreas de transición cubren aproximadamente un 36% del territorio brasileño y está considerada la sabana más biodiversa del mundo. El informe ofrece datos de cómo, a pesar de su discurso comprometido con la lucha contra la deforestación, las acciones que están tomando las multinacionales de la soja son ineficaces, lo que hace de la devastación de la zona una cuestión ambiental de gravedad para todo el planeta.

No en vano, la tasa de deforestación y conversión de vegetación nativa creció un 34% entre 2018 y 2020 en las 25 áreas de alto riesgo investigadas, a pesar de ser zonas prioritarias de protección. En ese periodo, la tasa de deforestación en las plantaciones de soja en esas zonas se incrementó en un 61%.

En 2018, los países europeos importaron 20 millones de toneladas de soja procedente de Brasil, destinadas en su mayoría a la alimentación animal. De hecho, al menos un 17% de las importaciones anuales de soja brasileña de la UE están vinculadas a la tala ilegal en las regiones de la Amazonía y El Cerrado.

Actualmente, la UE trabaja en una regulación que limite la importación de determinadas materias primas y productos causantes de deforestación, entre los que se encuentra la soja.

Por otro lado, la aseguradora Mapfre subrayó este lunes que ha contribuido a repoblar casi cinco hectáreas deforestadas gracias a la plantación de 4.874 árboles en Cerdedo-Cotobade (Pontevedra) y otros 1.667 en el Parque Nacional de Sintra-Cascais (norte de Portugal), lo cual permite la absorción de unas 4.000 toneladas de CO2 de la atmósfera y la neutralización de un 21% de las emisiones de carbono emitidas por la compañía en la Península Ibérica.

Mapfre creó el año pasado el proyecto 'Bosque Mapfre' para englobar las actuaciones de reforestación de la compañía, dirigidas a preservar la biodiversidad, el capital natural y crear sumideros de carbono en zonas donde desarrolla su actividad.

(SERVIMEDIA)
21 Mar 2022
MGR/mjg