El sondeo revela que una de cada cuatro familias compra mucho antes de su consumo los alimentos, habitualmente carnes y pescados, ara congelarlos y así evitar el incremento de su precio.

La antelación de la compra no afecta sólo a los productos perecederos, sino también a los de mayor periodo de caducidad, como turrones o bebidas, y la mayoría de los consumidores siguen considerando insustituibles determinados productos típicamente navideños, como el turrón, el cordero y el marisco, si bien un 4 por ciento asegura que piensa "pasar" de los alimentos típicos.

Con los regalos ocurre una situación similar, incluso más acentuad, ya que sólo una de cada tres familias llevará a casa estos obsequios a última hora, mientras que el resto se proveerá con más de dos semanas de antelación.

Al contrario de lo que cabría imaginar, las familias gastan tres veces más en regalos para adultos de lo que invierten en juguetes para niños, y la mayoría prefiere entregar los obsequios en Reyes antes que en Nochebuena. De media, cada unidad familiar gasta 29.000 pesetas en regalos.

Según la encuesta de "Eroski" a pesar de que ha aumentadoligeramente el número de personas que viaja en estas fechas, la inmensa mayoría de los vascos y navarros pasan las fiestas en casa.

A pesar de que entre los más jóvenes se incrementa el placer por viajar durante estas fiestas, menos de un uno por ciento de los vascos y navarros, aunque realice un viaje de placer, se pierde la cena familiar del 24 o del 31 de diciembre, o las comidas de Navidad, Año Nuevo o Reyes.