El Ejecutivo europeo espera que su llamamiento surta efectosen un total de 100 países del mundo y que las autoridades tomen medidas para suprimir la utilización de los llamados POP o contaminantes tóxicos orgánicos, cuyas emisiones son de las más peligrosas tanto para el hombre como para el medio ambiente.

El próximo mes de diciembre se celebra precisamente una convención, bajo el auspicio de Naciones Unidas, para tratar sobre la eliminación de estas sustancias nocivas.

En diversos tests realizados, los POP han demostrado ser capaces de interferir en el sstema hormonal de los seres humanos y de los animales. Pueden incluso producir daños en el sistema reproductivo e inmunológico, con secuelas incluso para posteriores generaciones.

Algunos de los compuestos que Bruselas desea eliminar cuanto antes son la aldrina, un pesticida contra termitas y otros insectos parecidos, y el famoso DDT, cuya presencia ha sido detectada no sólo en alimentos, sino también en leche materna.

Por el momento, países como Estados Unidos y Canadá se han mostrado reacios a scuchar el llamamiento de la Comisión Europea y participar en las negociaciones para acordar un calendario que ponga fin al uso de estas 12 sustancias peligrosas. El próximo día 7, los ministros europeos de Medio Ambiente debatirán sobre esta supresión.