La importación de crne tratada con hórmonas para provocar su engorde está prohibida en toda la Unión Europea, pero aún no se conoce con exactitud su repercusión en la salud humana.

La Comisión Europea ha concedido una subvención especial a un equipo de científicos que se encargarán de reunir toda la información existente y determinar las consecuencias del consumo de hórmonas sober los seres humanos.

La prohibición europea al vacuno hormonado ha provocado un conflicto entre la UE y los Estados Unidos, que ha recurrio a la Organización Mundial del Comercio. Esta institución, que dirime los conflictos mercantiles mundiales, ha otorgado a la UE un plazo de tiempo concreto para demostrar científicamente las consecuencias de la carne. En caso contrario, la UE deberá levantar el embargo.