Por ello, según informó hoy el ejecutivo comunitario, la propuesta destina la mayor parte de los fondos (45%) a medidas de promoción del crecimiento y del empleo (con un aumento del 3,2% respecto del 2009), para contribuir al restablecimiento de la competitividad en todo el territorio de la Unión Europea.

En concreto, se asignarán 62.000 millones de euros para empleo, infraestructuras y competitividad.

Se incrementarán en más del 12% los fondos para los grandes programas vinculados a la investigación y la energía (hasta los 1.080 millones de euros), y también aumentará el dinero para la política de cohesión, debiendo recibir los países de la UE-12 el 52% de los fondos estructurales y de cohesión (49.000 millones).

Todas las rúbricas del presupuesto experimentan un incremento hasta un total de 138.600 millones de euros en compromisos y 122.300 millones de euros en pagos.

La aprobación definitiva del presupuesto de la UE tendrá lugar durante la sesión plenaria del Parlamento Europeo en diciembre.