De los 96 millones de ecus (unos 14.800 millones de pesetas) a repartir este año po el programa LIFE, España se quedará con el 16 por ciento, lo que supone doblar los recursos económicos con los que podrán financiarse planes de conservación de fauna y flora amenazada, así como la realización de inventarios y el mantenimiento de vías pecuarias y otras acciones medioambientales.

En concreto, los programas españoles para preservar especies como la foca monje, el oso pardo, el lince ibérico, el águila imperial, el lagarto gigante de Hierro o las dos especies de palomas de la laurisilva anaria, así como el de protección a la flora amenazada de Andalucía y otros planes en los que participan el Icona y las comunidades autónomas, acumularán un presupuesto de 11 millones de ecus, unos 1.700 millones de pesetas.

Los 700 millones de pesetas restantes, según el Ministerio de Agricultura, se destinarán a otros programas de protección medioambiental en todo el territorio español.

Desde que el programa LIFE se puso en marcha en 1991, España ha recibido un total de 28 millones de ecus en fndos comunitarios para este tipo de actuaciones, incluida la partida recientemente aprobada, y han servido para financiar 200 proyectos, de los 1.750 presentados en toda la Comunidad ante las autoridades de Bruselas.

En conjunto, el programa comunitario cuenta con un presupuesto para el período 1991-1995 de 400 millones de ecus, cerca de 60.000 millones de pesetas al cambio actual.