Bono aseguró, en declaraciones a la Cadena Ser recogidas por Servimedia, que "invocar el RH, o un fuero viejo, o un Rey que hizo esto o lo otro para justificar un trato diferente es una obscenidad democrática".

El titular de Defensa admitió que hay aspectos del proyecto de reforma del Estatuto de Cataluña que "no me gustan absolutamente nada", y citó expresamente el referido a la definición de Cataluña como nación.

"Soy de los que cree, y conmigo millones de españoles, que en la Constitución española sólo se habla de una nación, la española", sentenció el ministro, para quien, "o se modifica la Constitución, o aquí no hay más nación que España" desde el punto de vista "jurídico".

No obstante, puede haber un "sentimiento respetable a nivel cultural, histórico" acerca de considerarse una nación, "pero no tiene relevancia desde el punto de vista de la riqueza".

Bono tachó de "obscenidad" y calificó de "rancio, antiguo y trabucaide el pretender hoy tener más derechos por pagar más impuestos", y lo comparó con la "obscenidad" que supondría que una persona de renta alta acudiera a un hospital y pidiera mejor trato que un "desgraciado" con menos recursos.

"Me interesa la igualdad, por eso soy socialista", argumentó el ministro, para quien otras reivindicaciones son "carlistonadas que no tienen hoy día ninguna vigencia en prácticamente ningún país serio del mundo".

Bono aseguró tener "gran confianza" en José Luis Rodríguez Zapatero y dijo que, mientras sea presidente del Gobierno, en función de su "capacidad jurídica" y sus "poderes constitucionales", la reforma del Estatuto catalán se "acomodará a la Constitución y no significará ninguna humillación para ningún ciudadano de buena voluntad de Cataluña".

"No hay por qué humillar a nadie", agregó el titular de Defensa, pero "tampoco dar siempre la razón" al interlocutor que se tiene enfrente.