Según Bono, la central nuclear de Trillo se construyó sin pensar previamente dónde se iban a almacenar los residuos que generara durante su vida activa.

En declaraciones a la Ser, José Bono indicó que la central, "en este momento, no tiene dónde almacenar los residuos de su reactor y en dos años tendrá que cerrar si no encuentra un lugar".

El presidente de Castilla-La Mancha criticó tanto la falta de previsión por parte de los reponsables de la central sobre dónde verter sus residuos como la decisión del Consejo de Ministros de autorizar un cementerio nuclear en esta instalación.

"Piqué lo ha resuelto 'manu militari', pero vamos a recurrir esa decisión, que consideramos irrespetuosa con la comunidad y el ayuntamiento, y el principio de igualdad espero hacerlo exigible. Me refiero a comunidades a las que el Gobierno central está rendido y acepta las imposiciones de sus socios porque los necesita", aseguró.