En declaraciones a Onda Cero, Bono señaló rotundo que "yo no soy de Madrid, no vivo en Madrid, y no podía ser el candidato. Quizás por no querer ser despreciativo y que no se entendiera como desdén hacia un ofrecimiento de esa importancia política, no quise ser rotundo en público".

"Pero le aseguro", prosiguió en conversación con Carlos Herrera, "que desde el día 2 de septiembre, en que José Blanco me hace la oferta, yo le hablo con una rotundidad clara. Me enseña encuestas y le digo que no. Y yo creía que así estaba (entre el martes y el miercoles pasados, cuando se organizan el anuncio y el desmentido)".

Bono reiteró hoy que "a nadie le amarga un dulce", pero añadió acto seguido que el se fue el 7 de abril del Ministerio de Defensa y "le expliqué al presidente del Gobierno mis razones, entre ellas la de hacer una mayor vida familiar".

El ex ministro lamenta el equívoco. "Unos me dijeron que no lo desmintiera rotundamente. Yo creía que era para buscar una alternativa, para facilitarlo. Y en el fondo creo que me decían que no dijera que no, porque mantenían la esperanza de poderme convencer. Esa es la razón. Esta es la verdad".

Abundando sobre este asunto, Bono ha señalado que "nunca me he visto en la más mínima posibilidad de aceptar esa candidatura".

Sobre posibles molestias en la cúpula socialista, ha afirmado lo siguiente: "Yo con Simancas no hablo, por lo menos, desde hace un año. Dicen que aprobarían por unanimidad mi candidatura. Yo se lo agradezco, pero es que ni había pedido esa candidatura, ni he hablado con Simancas porque, como no pensaba aceptarla, tampoco quería someterme al trámite previo de la proclamación de las candidaturas o preparación de las mismas".

En cuanto a si es cierto que José Blanco se enteró por la prensa de su renuncia, el ex ministro de Defensa ha sido rotundo: "Me gustaría ser todo lo amable posible con José Blanco, porque es buena persona y le tengo un gran cariño, pero yo le dije que no el día 2 de septiembre. Comimos juntos y entendió mis razones. Cuando dijo que se había enterado por la prensa, sería de lo último. Pero bueno, pelillos a la mar".

Finalmente, José Bono ha explicado que "lo que más lamento es no haberle podido decir que sí al presidente del Gobierno, porque le tengo un gran cariño y un gran respeto. Me agradaríapoder decirle que sí a todo lo que a él le agradara".

Y reveló, además, que no acudió ayer a la recepción de los Reyes en el Palacio Real con motivo de la Fiesta Nacional por "prudencia". "Los corrillos no hubiesen sido nada generosos hacia los que no les gustan los corrillos", dijo.