Entre los restos de la explosión, que se dispersaron en un radio de hasta 500 metros, los equipos de rescate encontraron hoy parte de los cuerpos de lo fallecidos totalmente calcinados. Las cuatro personas que resultaron muertas son Juan García, Jordi Joanals, Benvingut Joanals y Jordi Fuster, todos ellos de entre 22 y 25 años y trabajadores de la industria.

El siniestro causó además seis heridos, de los cuales sólo la secretaria de la empresa, Esther Deulofeu, permanece hospitalizada en el centro Josep Trueta de Gerona y su pronóstico es reservado. Los otros cinco heridos fueron dados de alta ayer mismo.

La causa más probable de la explosión pdría deberse a un fallo humano o bien al mal estado de conservación de parte de la mercancía almacenada, aunque aún no se ha podido determinar, según indicó el jefe del cuerpo de bomberosde la Generalitat, Antoni Güell. La onda expansiva provocó también que algunos automóviles que estaban aparcados cerca de allí quedaran totalmente destrozados.

Por otra parte, el Ayuntamiento de Vidreres celebró este mediodía un pleno extraordinario para expresar oficialmente el dolor de la población por el accidentedecretó tres días de duelo.

MEDIDAS PREVENTIVAS

El gobernador civil de Barcelona, Ferran Cardenal, manifestó hoy que a raíz del trágico accidente ocurrido ayer en Vidreres, deberán endurecerse las medidas de segridad para prevenir accidentes en la manipulación de petardos en las verbenas de San Juan y San Pedro.

Cardenal explicó que después de las elecciones generales se reunirá con los gobernadores civiles de las otras provincias catalanas para tratar esta cuestión y fijar unas medidas comune.