Según indicaron fuents de dicha patronal, los bodegueros temen una reacción negativa por parte del mercado nacional a esta subida, dada la debilidad del consumo privado, y han estimado una caída de las ventas en 12.000 botellas anuales.

Fedejerez considera un error la decisión del Gobierno, ya que en su opinión podría agravar la crisis que desde hace unos años atraviesa este sector, tradicional fuente de riqueza de la comarca jerezana.