Esa es la propuesta que reaiza GM Vending, empresa que se encarga de la distribución de estas máquinas expendedoras, y que trata así de poner solución a la venta incontrolada de tabaco a menores de 18 años.

En una entrevista publicada en la revista "La Boutique de El Fumador", el presidente de GM Vending, Jesús Irurre, propone que se dote a las máquinas de un dispositivo que sólo pueda desbloquearse con una moneda, que denomina "token", que podría ser acuñado por la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre (FNMT) y que estaría en poesión del dueño del establecimiento en el que se ubica la expendedora.

El camarero entregaría el "token" al cliente en el momento de la compra, cerciorándose de su mayoría de edad, y así se podría desbloquear la máquina. Con ello, se evitaría que los menores pudieran utilizarlas de espaldas a sus tutores y supondría un freno para el consumo de este colectivo.

Irurre denunció que la máquina expendedora está siendo "injustamente tratada" por diversas instituciones como la Organización Mundial de laSalud (OMS), la Unión Europea y los gobiernos autonómicos y nacionales, quienes pretenden "desterrarla" al considerar que promueve el acceso de los menores al consumo de tabaco.

Las expendedoras automáticas "pueden ser el mejor sistema para impedir este problema" y, además, tienen otros aspectos positivos como que eliminan la venta de cigarrillos sueltos e impiden el contrabando, defendió.