Blanco, que pronunció en el "Club Siglo XXI" una conferencia sobre El nuevo PSOE ante el reto del siglo XXI", expuso la visión de los socialistas acerca de los desafíos planteados por la globalización y las necesarias reformas para afrontarlos.

Al hablar de esas reformas, dedicó un apartado a la necesidad de hacer "un esfuerzo didáctico" para recordar a los ciudadanos que la democracia "es mucho más costosa que una dictadura, no sólo en el diseño de políticas que descansan en el debate y no en la imposición, sino también en el terreno económico.

"La realidad es ue la democracia tiene un coste que debemos asumir si queremos un sistema transparente", sentenció Blanco, para quien la aportación pública a los partidos es claramente insuficiente, dada las tareas que deben asumir.

Es necesario, por ello, imponer los llamados "bolsillos de cristal". "Ya está bien de aplicar analgésicos", exclamó. "Hay que atajar la enfermedad desde la raíz, y para ello nada mejor que los ciudadanos sepan cuánto nos cuesta a todos mantener el sistema y cuáles son las fuentes".

MEDIS DE COMUNICACION

José Blanco reclamó también un consenso entre los principales partidos sobre el papel que deben desempeñar los medios de comunicación, comenzando por un acuerdo que favorezca la independencia y el carácter de servicio público de RTVE.

En este sentido, Blanco recordó los numerosos estudios que demostraron cómo la repetición del "caso Lewinsky" en las televisiones americanas provocó la adhesión masiva de los ciudadanos con el presidente Clinton.

"Algo parecido ha sucedido en as elecciones al Parlamento vasco, según varios analistas, al provocarse una respuesta masiva del voto identitario del nacionalismo frente a la imagen que algunos medios transmitieron de la realidad vasca", agregó.

Tras este ejemplo, instó a los medios de comunicación a "asumir plenamente su responsabilidad en una sociedad que es en efecto mediática, y a contribuir de manera especial a la consecución del interés general. Para ello no existe más que un camino: el de la profesionalidad en el trabajo y l objetividad en la información".

Blanco apostó además por una relación mutua entre política y periodista basada en la objetividad, la veracidad, la pluralidad y las buenas prácticas, "que eviten al político ser un showman sin contenido ideológico y a los medios ser marionetas" en manos de los gobiernos o de los grupos económicos y financieros.

PRIMARIAS

En cuanto a las otras materias que, en su opinión, es necesario reformar para afrontar los cambios sociales, Blanco abogó por consolidar el modlo territorial reformando el Senado y por profundizar la democracia interna para recuperar el prestigio de la actividad política.

Por ejemplo, apostó por limitar los mandatos institucionales, endurecer el régimen de incompatibilidades, e instaurar las primarias como método de selección de candidatos.

También se mostró partidario de fomentar el respeto por las minorías y por los más desfavorecidos en el sistema político. En este punto, juzgó necesario aplicar elementos correctores tales como el esablecimiento de porcentajes mínimos que salvaguarden la representación, o medidas de discriminación positiva en aquéllas circunstancias concretas que así lo precisen.