Blanco inauguró un curso de verano de la Fundación Jaime Vera, ligada al PSOE, y desgranó las medidas emprendidas por el Gobierno y las que contiene la agenda pendiente, con una mención especial a la extensión de derechos como el del matrimonio para las parejas del mismo sexo.

Fue en exte contexto en el que describió su sentimiento "con todo respeto, cuando veo a la derecha peregrinando a ese encuentro con el Papa -yo soy creyente, vaya por delante-, con fe ciega para defender a la familia".

"Cómo actúa la derecha", dijo a los asistentes, "porque hay alguna persona en la derecha que representa como nadie ese discurso de ir construyendo familias".

Recordó, en concreto, y en clara referencia a Francisco Alvarez Cascos, a un dirigente que cuando era concejal en Gijón y se tramitaba la Ley del Divorcio aseguraba que hacer uso de esa norma no era ejemplificador para un cargo público.

"Va por la tercera familia", subrayó, y constituye en sí mismo "un ejemplo claro del cinismo de la derecha" ante este tipo de leyes.

José Blanco denunció que el PP ha criticado "con dureza" esa ley, pero "vaya festín que montó" recientemente un concejal homosexual del PP en Orense para celebrar su matrimonio.

"Me parece bien que la derecha evolucione, pero no que lo haga con tanto retraso", dijo Blanco, convencido de que dentro de unos años el PP será el más firme defensor de las leyes aprobadas, también de las reformas estatutarias.

NO A GOBIERNOS "TRINCHERA"

A los asistentes a este curso, "Ciudadanos protagonistas del nuevo gobierno local", Blanco aseguró que el PSOE gobernará más comunidades autónomas y más ayuntamientos tras las elecciones de 2007.

El PSOE ganará esas elecciones con más margen del obtenido en las anteriores, porque los ciudadanos quieren gobiernos que solucionen sus problemas, no que se conviertan "en trincheras" desde las que combatir al Gobierno central.

En un momento de su intervención, Blanco expresó su convicción de que el PP no dará marcha atrás a las medidas que ahora critique cuando llegue al Gobierno, que al paso que va "no será antes de 2020".

El PSOE ganará las próximas elecciones municipales y autonómicas, aseguró, y lo advierte con un año de antelación "para que algunos se vayan preparando" y no se lleven la sorpresa en la noche electoral.

De esa forma, añadió, la derrota puede conducirles a preguntarse por los fallos cometidos, "en lugar de pasarse cuatro años tratando de deslegitimar el resultado".