ETA

BLANCO ASEGURA EN NUEVA YORK QUE EL GOBIERNO SÓLO HABLARÁ CON ETA SOBRE SU RENUNCIA DEFINITIVA A LA VIOLENCIA

NUEVA YORK
SERVIMEDIA

El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, ha asegurado en Nueva York que el Gobierno hablará con ETA "exclusivamente" sobre su propio final, "cuándo y cómo renuncian definitivamente a la violencia y proceden a su propia extinción".

"No hay ningún otro tema en la agenda de ese diálogo, y ETA lo sabe", sentenció Blanco durante una conferencia pronunciada la pasada noche (madrugada en España) en el Instituto Cervantes de Nueva York.

Blanco resumió ante los asistentes la historia de ETA, que nació durante el franquismo pero pronto demostró "que su enemigo no era la dictadura sino la libertad", y en 30 años ha matado a casi 1.000 personas, ha cometido numerosos secuestros "y ha mantenido bajo chantaje y extorsión a una parte muy importante de la sociedad vasca".

Mientras, explicó, el pueblo vasco ha conseguido democráticamente el más alto nivel de autogobierno que existe actualmente en cualquier Estado descentralizado, y hoy se puede decir "que la democracia ha derrotado al terrorismo de ETA".

Ello ha sido posible, relató, gracias a la presión policial y judicial, como muestran las 200 detenciones en dos años "pese al descenso de los atentados". También gracias a la cooperación internacional y que se ha privado a ETA "de su principal instrumento de labor política al poner fuera de la ley su brazo político, Batasuna".

Blanco aseguró a los asistentes a la conferencia que todos los gobiernos españoles han buscado el final del terrorismo dialogando con ETA, "y todos tuvieron el apoyo y la comprensión de la sociedad española y de las fuerzas políticas, aunque no lograron su objetivo". "Nadie les reprochó que lo intentaran ni les puso dificultades en el camino".

La "extrema debilidad" de la banda, después de tres años sin atentados mortales y "desaparecidas" sus opciones de condicionar la vida política, condujeron, dijo, a la declaración de alto el fuego permanente.

Tras la verificación de que "no existe movimiento terrorista de ninguna clase", se anunció el comienzo del diálogo con ETA, que está perfectamente acotado, garantizó.

"Vamos a hablar con ETA exclusivamente sobre el final de ETA. Cuándo y cómo renuncian definitivamente a la violencia y proceden a su propia extinción. No hay ningún otro tema en la agenda de ese diálogo, y ETA lo sabe".

Reiteró también que el futuro político del País Vasco está en manos de los ciudadanos y de sus representantes legítimos, y que todo debate se emprenderá en el marco de la ley, en el que el PSOE promoverá un acuerdo político "por aquello que más ha sufrido la sociedad del País Vasco, la convivencia".

"Pero, ni nosotros tenemos nada que decirle a ETA sobre estos temas, ni nos interesa lo que ETA tenga que decir. Lo único que nos interesa de ETA es su final, y sólo de eso estamos dispuestos a hablar con ellos".

Blanco explicó que existe en el País Vasco un reducido grupo de defensores de ideas independentistas, la izquierda abertzale, un colectivo que los socialistas "deseamos que participe en el debate democrático y pueda defender pacíficamente sus propias ideas".

Eso exige un paso previo, insistió, el cumplimiento de la ley, que "deja fuera de la vida política a cualquier organización que no esté totalmente desligada del terrorismo, que no condene la violencia o que no admita la vía pacífica como único cauce para defender sus ideas".

Aseguró, en este contexto, que eso es lo que trasladaron los socialistas vascos a la izquierda abertzale en la reunión de la semana pasada.

"ELEMENTOS PARECIDOS" AL IRA

"Estamos en el principio de un proceso que, salvando todas las diferencias, tiene elementos parecidos al que se produjo en Irlanda del Norte ante el terrorismo del IRA" y, como en ese caso, el proceso será "duro, largo y difícil".

Blanco explicó también que el Gobierno cuenta con un amplio respaldo que incluye a todos los partidos, excepto el PP, cuyo comportamiento "en contra de este proceso" provoca inquietud y perplejidad".

"Como es lógico, tengo una opinión sobre ello, y una opinión muy dura. La más dura que se puede tener sobre un partido que ha gobernado y pretende volver a gobernar", dijo.

Sin embargo, evitó criticar al PP en coherencia con el principio de que los dirigentes políticos no deben reproducir polémicas internas fuera de España. Se limitó por ello a reiterar que en el PSOE "no renunciamos ni renunciaremos a conseguir que el PP se incorpore al consenso yapoye este proceso de paz".

Blanco recordó que el PP "ha pagado" en primera persona, como el PSOE, las consecuencias del terrorismo y su Gobierno contribuyó como los demás a crear la situación que hoy permite tener esperanzas ciertas de paz.

"Por eso", concluyó, "no nos equivoquemos de enemigo: con quien queremos acabar es con el terrorismo, no con el partido rival".

(SERVIMEDIA)
11 Jul 2006
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