No obstante, el premio Nacional de Literatura aseguró que "tengo la posibilidad de comenzar de nuevo, ya que mi nombre literario es un seudónimo." El verdadero nombre del autor de "Obabakoak" es Joseba Irazu. Ante el público soriano, el autor guipuzcoano afirmó que en estos momentos en el mundo literario "hay muchas presiones, y no estoy hablando de imposiciones creativas, ni de buenos ni de malos. Simplemente sucede que los presupuestos de los que partí ya no se mantienen".

Esta y otras razones, confesó Atxaga, le han llevado a cerrar un ciclo literario que se abrió en 1972 con su primera publicación aparecida en la antología "Euskal Literatura-72".

"Mi retirada no supone una crítica a mis colega, pero no estoy por compartir el actual ambiente", que, en su opinión, mantiene al escritor alejado de su entorno.

"Estamos abusando de una posición aristocrática heredada del XIX, cuando el creador no daba explicaciones sobre sí mismo", indicó Atxaga, quien puso como ejemplo de ocultamiento las elevadas cifras económicas que ganan muchos escritores.

Finalmente, Atxaga asumió su incapacidad para cambiar esta situación, por lo que "he decidio cambiar mi nombre". Quizá esa nueva etapa, aún indefind, pudiera bautizarse con su verdadero nombre: Joseba Irazu.