LOS BENEFICIOS DE LAS PYMES CAYERON UN 13 POR CIENTO EN 1990
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Los beneficios de las pequeñas y medianas empresas (pymes) españolas cayeron un 13 por ciento en 1990, según el IV Informe Anual Económic-Social sobre la Pyme elaborado por la auditora Prodemsa y presentado hoy en rueda de prensa por su director general, Juan Carlos Para.
Para explicó que con la coyuntura económica actual, los beneficios de las pymes en 1991 descenderán en los mismos términos que en 1990, concretamente entre un 12 y un 13 por ciento. El pasado año, el 82 por ciento de las pymes registraron beneficios antes de impuestos y el 18 por ciento pérdidas.
De las pymes que registraron beneficios, en un 17 por ciento de loscasos fueron superiores a diez millones de pesetas. En las que tuvieron pérdidas, un 4 por ciento superaron los diez millones.
La cifra de negocio de las pymes españolas creció un 12,21 por ciento en 1990 respecto al año anterior. La tesorería, sin embargo, cayó en 5,3 puntos, pasando del 12,4 por ciento en 1989 al 7,10 por ciento el año pasado, como consecuencia de que no vendieron lo que esperaban, según Para. Añadió que la tesorería se comportará este año igual que el pasado.
El director generl de Prodemsa explicó que el aumento del 26 por ciento en la partida de clientes, unido a un incremento de las ventas del 12 por ciento y a la caída de la tesorería, provocará que en el futuro las pymes tengan problemas de liquidez.
En cuanto al pasivo de las pymes, en 1990 aumentaron los acreedores a corto plazo y se registró un menor endeudamiento a largo plazo, que es compensado con un aumento de los fondos propios. El 60 por ciento de las pymes tiene unos fondos propios de entre uno y sesenta millnes de pesetas.
Los recursos a largo plazo disminuyen en 7 puntos, porcentaje similar al incremento de la financiación a corto plazo, con lo que los ratios medios se sitúan en el 13,26 por ciento para el largo plazo y en el 86,64 para la financiación ajena a corto plazo. El endeudamiento con las entidades de crédito a largo plazo se situó en 1990 en el 69,63 por ciento, frente al 81,16 de 1989.
Respecto a los gastos de explotación, destaca la caída de dos puntos en la partida de aprovisionamiento que pasa del 76,06 al 74,06 por ciento. Los gastos de personal, que suponen el 13,75 por ciento del total, aumentan 1,28 puntos, debido al incremento de los salarios y al crecimiento de las plantillas, que fue del 16 por ciento. La plantilla media por empresa pasó de 6,5 a 7,5 personas.
El coste medio por trabajador en las pymes españolas fue de 2.949.329 pesetas, un 7 por ciento más que en 1989, lo que ocasionó una pérdida en el índice de productividad de las empresas de 2,5 puntos (del 39,2 por cieto en 1989 al 36,7 por ciento en 1990).
CONTRATOS TEMPORALES
Juan Carlos Para destacó el alto grado de rotación del personal empleado en las pymes. Mientras la contratación indefinida descendió un 3 por ciento y un 3,9 por ciento la contratación por obra determinada, la temporal acogida a contratos de fomento del empleo creció un 8 por ciento.
Según Para, las pymes españolas tienen mucho miedo a crecer, sobre todo en personal, como consecuencia de la falta de flexibilización de las plantillas e los malos momentos económicos para las empresas y de las elevadas indemnizaciones que tienen que pagar por despido, por lo que la mayoría de los contratos que realizan son temporales.
Añadió que con el aumento de los costes salariales y el incremento de la morosidad será muy difícil que este año se mantenga el ritmo de crecimiento del empleo registrado en 1990.
El informe elaborado por Prodemsa, realizado sobre una muestra de 275 empresas, pone de manifiesto que medidas de enfriamiento económicoadoptadas por el Gobierno en 1990 siguen afectando a las pymes en los primeros meses de este año y explicó que aunque su incidencia se mitigó durante el verano, el recorte presupuestario está influyendo negativamente en la actividad de estas empresas.
El director general de Prodemsa destacó el desconocimiento por parte de los pequeños y medianos empresarios de las ayudas existentes y destacó la excesiva burocracia que tienen que soportar para acceder a ellas. También resaltó la preocupación de las pyms por la entrada en vigor del mercado único, aunque manifestó que la mayoría de las pymes no están adoptando medidas concretas para afrontarlo.
Juan Carlos Para insistió en la necesidad de fomentar medidas de apoyo para las pymes en los próximos años y aseguró que, aunque en líneas generales su situación "es aceptable", dado el aumento de la cifra de negocio, los incrementos de los salarios, la pérdida de productividad, la caída de los beneficios y la falta de financiación adecuada "pueden colocarlas n una situación delicada y provocar que los índices de morosidad se disparen".
Las pymes en España suponen el 98 por ciento del sector empresarial, dan empleo al 80 por ciento de la población activa y su actividad genera más de las dos terceras partes del PIB.
(SERVIMEDIA)
02 Dic 1991
NLV