La evolución del negocio energético en España y de generación en México fueron los principales motores del crecimiento operativo de la compañía durante el ejercicio, junto a la reducción de los costes de aprovisionamiento y a la contención de los costes operativos. Estos factores consiguieron que el descenso del 1,1% registrado en la cifra de negoci, hasta alcanzar los 9.488,5 millones de euros, no provocaran una caída del resultado.

Asimismo, la eléctrica destacó el incremento experimentado por la cifra de negocio de su división de energías renovables (+147,8%), en línea con el crecimiento de la producción y la entrada en funcionamiento de nuevas instalaciones eólicas, así como el incremento de esta partida en el negocio comercial (+32%), fruto de la mayor actividad de este área en electricidad y gas.

La flexibilidad del parque generador d la compañía quedó reflejada en el aumento en la utilización de los ciclos combinados, que representan ya un 7% de la producción total en España, el crecimiento de la producción con renovables en un 80,5% y el incremento de la generación hidráulica (+105,3%).

Por su parte, el gas ha empezado a reemplazar parcialmente la producción con carbón (-25,1%) y la de fuel-oil (-70,2%). Este cambio en el "mix" de producción permitió reducir un 28,5% los costes de aprovisionamiento del negocio. Iberdrola contabaa 31 de diciembre del pasado año con un nivel de reservas hidráulicas equivalentes a 6.498 GWh (61,4%).

Este incremento de la energía generada permitió a la empresa elevar su cuota en el mercado de producción durante el ejercicio hasta el 30,8%, desde el 28,3% registrado en 2002. La capacidad de generación de caja del Grupo tuvo su reflejo en el aumento del "cash-flow" en en un 12,7%, hasta alcanzar los 1.811,7 millones de euros.

Además, el margen bruto se situó en 3.846,8 millones euros, con un recimiento del 7,3% respecto al ejercicio 2002, mientras que el beneficio antes de intereses, amortizaciones e impuestos (EBITDA) consolidado experimentó un crecimiento del 9,1%, hasta alcanzar los 2.617 millones de euros.

DIVIDENDO A CUENTA

Por lo que se refiere a la retribución de los títulos de la compañía, Iberdrola abonó el pasado 2 de enero un dividendo a cuenta de los beneficios de 2003 de 0,286 euros brutos por acción, lo que representa un incremento del 10% con respecto al dividendo a cuent del ejercicio 2002.

Finalmente, la eléctrica acometió unas inversiones por importe de 2.629 millones de euros en 2003, a la vez que logró una nueva disminución de la deuda neta y del ratio de apalancamiento con respecto a 2002, que se situó en un 55,8% frente al 57,1% del ejercicio anterior.

La deuda financiera neta al cierre de 2003 se situó en 10.378,5 millones de euros, lo que supone una disminución de 309 millones de euros con respecto a diciembre de 2002. Por lo que se refiere al programa d desinversiones, Iberdrola ha obtenido 2.973 millones en los dos últimos años, de los cuales 934 millones correspondieron a 2003.