El beneficio neto fue de 30.523 millones, lo que supone un incremento del 0,7% respecto al ejercicio precedente. La diferencia entre ambas tasas de crecimiento, según la propia entidad, se debe "a la mayor presión fiscal efectiva que se soporta este año por no gozar de deducciones fiscales extraordinarias".

Las inversiones crediticias aumnetaron un 14,7% durante los últimos doce meses. Los deudores morosos, en ese mismo periodo, disminuyeron un 3,3%, por lo que a tasa de morosidad se sitúa en el 2,33%.

Los recursos de clientes crecieron un 7,4%. La acción del Popular, tras haber alcanzado una cotización máxima de 19.400 pesetas, ha cerrado el semestre con 18.000 pesetas, un 15% por encima del 31 de diciembre.

Todos los bancos que componen el grupo popular consiguieron beneficios durante el primer semestre. A la cabeza figura la matriz, Banco popular, con 29.684 millones de pesetas, seguida del Banco de Andalucía, con 7.983 millones de pesetas, del Bancode Castilla, con 4.952 millones y el Banco de Galicia, con 3.077 millones.