PARO

BEBER VINO CON MODERACION REDUCE LA MORTALIDAD POR INFARTO Y LAS ENFERMEDADES CARDIOVASCULARES

- Según un estudio europeo realizado por el Hospital Clínico de Barcelona

MADRID
SERVIMEDIA

Beber vino con moderación reduce la motalidad por infarto y el desarrollo de enfermedades cardiovasculares en general. Además, el vino es un poderoso antioxidante y antiinflamatorio que actúa como inhibidor en las primereras fases de la arteriosclerosis.

Estas son algunas de las conclusiones que recoge el estudio "Vino y enfermedades cardiovasculares", realizado por el Hospital Clínico de Barcelona en colaboración con la Fundación para la Investigación del Vino y la Nutrición que hoy se presentó en Madrid.

Según explicaron en la presentación los doctores Alvaro Urbano-Márquez y Ramón Estruch, investigadores del Hospital de Barcelona, el objetivo del estudio ha sido conocer los mecanismos que intervienen en la reducción del riesgo coronario en los consumidores moderados de vino.

Para ello, analizaron y compararon los efectos del consumo moderado de vino tinto con los de la ginebra. En ambos casos se reducían los niveles sanguíneos de tres marcadores sanguíneos de la inflamación, un efecto que se atribuye al etanol que contienen ambas bebidas.

Sin embargo, sólo tras el consumo de vino se apreció una reducción muy significativa de las moléculas de adhesión monocitarias y endoteliales, lo que significa un mayor efecto antiinflamatorio del vino que debe atribuirse a los componentes no alcohólicos del vino, los polifenoles.

Según el doctor Estruch, los resultados obtenidos permiten afirmar que, siempre en dosis bajas, el alcohol tiene unos efectos beneficiosos sobre la enfermedad coronaria, unos efectos positivos que se incrementan en el caso del vino por su efecto antiinflamatorio.

La ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación, Elena Espinosa, se felicitó por los resultados del estudio que, según dijo, viene a confirmar los beneficios que históricamente se le han atribuido al consumo moderado de vino.

En su opinión, estudios como éste son "un apoyo fundamental" para este sector que en los últimos años está sufriendo un estancamiento en su consumo. No obstante, la ministra adelantó que los datos del 2004 no han sido tan negativos como se esperaba.

Según dijo, en 2004 se ha producido un aumento del 13,6% respecto al año anterior en los vinos con denominación de origen. Además, la disminución del consumo de vinos de mesa se ha situado en tan sólo un 0,3% respecto a 2003.

Por último, la responsable de Agricultura destacó la importancia de este sector como uno de los principales motores de la economía agraria en España.

(SERVIMEDIA)
02 Mar 2005
SBA