El nombramiento de Pedro Luis Uriarte como consejero delegado del BBV, unido a la supresión de las vicepresidencias ejecutivas (primero Alfredo Sáenz y luego Javier Gúrpide) ha supuesto que el hasta ahora encargado de banca al por menor pase a controlar el resto de los sectores de negocio.

Para contrarrestar ese poder, el Consejo de Administración del BBV había pensado en ceder a Santiago Bergreche todas las responsabilidades que tuvo el actual consejero delegado del Banco Central Hispano, Angel Corcóstegui.

En este punto, Bastida, que ya ejercía algunas de estas funciones, ha solicitado ser nombrado, asimismo, consejero.

Por su parte, Bergareche pertenece a una de las familias clásicas de la aristocracia vasca. Junto a los Ybarra, los Bergareche controlan el grupo editorial de El Correo Español-El Pueblo Vasco, el primero por cifras de difusión de todo el país.

Hasta la intervenión de Banesto, Bergareche no había participado en las gestión bancaria. Dirigía la inmobiliaria Metrovacesa, filial del BBV.

Tras la adjudicación de Banesto al Santander de Emilio Botín y la marcha de Corcóstegui, entró en responsabilidades puramente bancarias, aunque las funcioneses de Corcóstegui se dividieron entre él y Javier Echenique.

Por otra parte, Servimedia ha podido saber, de fuentes del BBV, que la indemnización solicitada por Javier Gúrpide, de 1.000 millones de pesetas, podria quedrse en los 800. De otra forma, Ybarra está dispuesto a que permanezca como consejero no ejecutivo indefinidamente.