Tomé, hombre de confianza de Aznar desde los tiempos en que ejerció de asesor en Presidencia del Gobierno, va a controlar el día a día de la macrofundación popular resutante de la fusión de las cinco fundaciones que mantenía el PP hasta ahora.

En noviembre pasado, en el acto de firma notrial de fusión de todas ellas, el jefe del Ejecutivo pidió hoy que la nueva gran fundación sea una "laboratorio de ideas" que pueda ponerse "al servicio de España".

El líder del PP resaltó su compromiso "inequívoco" con la unión de las Fundaciones Humanismo y Democracia, Estudios Europeos, Cánovas del Castillo, Popular Iberoamericana y de Análisis y Estudios Políticos, además del Instituto de Formación Política.

La nueva institución resultante desarrollará sus actividades en tres campos: formació, relaciones internacionales y análisis y estudios. Para ello, se crearán tres institutos bajo los nombres de Popular Iberoamericana, Cánovas del Castillo y Manuel Fraga Iribarne.

Ante un centenar de altos cargos del Partido Popular, Aznar advirtió entonces también a los integrantes de la nueva fundación de que un Gobierno "ni puede ni debe perder" nunca las ideas porque las decisiones del Ejecutivo nacen siempre de una idea política.