"Yo lo haría, dejándolo a resultas de la investigación, y en el momento que se comprobara, echarle porque no es de los nuestros", añadió.

El senador socialista señaló que "una persona que se preocupa más de los intereses propios que de los de los demás o que viene aquí para sacar provecho propio, no es de los nuestros y no tiene nada que ver con el socialismo ni con los intereses que defendeos".

Los casos denunciados de corrupción generan, según Barranco, dos tipos de problemas, los cometidos por quienes son del partido, "como es el caso de Roldán, contra los que habría que actuar con una "gran severidad y rapidez", y los realizados por los que se mueven en el entorno del PSOE, caso de Mariano Rubio, ex gobernador del Banco de España.

"Cuando alguién hace ese tipo de cosas, la primera reflexión que me viene a la mente es 'ese no es de los nuestros", explicó Barranco, quien añadió: "l PSOE no ha sido nunca, ni en estos momentos, un partido de golfos, pero hay que reconocer que están surgiendo casos dentro y en el entorno del PSOE que cuestionan nuestra honestidad y esa trayectoria histórica".

Para el senador del PSOE, casos como los de Roldán y Rubio "están cuestionando la honestidad de la inmensa mayoría de los militantes, que somos personas honradas y que lo estamos demostrando día a día".

Con relación a los implicados en irregularidades y que están en el entorno del PSOE,pero no tienen carnet, la conocida como "beautiful people", Barranco afirmó: "Lo unico que nos ha hecho es daño"

"La mayoría de las personas que nos votan son ciudadanos normales, los trabajadores, las capas medias y los sectores más debiles, que no tienen nada que ver con la beautiful, ni con la calefación en el quiosko de un perro, ni con lo que pasa en el parqué de la bolsa", aclaró.

Tras subrayar que "yo no tengo por qué defender los intereses de un multimillonario, que ya se los defiende él" Barranco dijo que su opción política pasa por "defender los intereses de los más débiles".

Al respecto, explicó que "las ideas del PSOE siguen plenamente vigentes", aunque admitió que precisa de una regeración, "palabra que me gusta más que la de renovar, que no sé muy bien qué es, ya que hay mensajes distintos dependiendo de cada portavoz renovador"

Pidió la regeneración de su partido, pero sin perder "nuestras señas de identidad, de lo que ha sido el socialismo democrático a lo largo de nuestrs 114 años de historia y defendiendo los intereses de la mayoría de los trabajadores y especialmente de los sectores más debiles de la sociedad".

"El PSOE debe ser un partido plural, moderno y cohesionado, frente a los que opinan que debe ser un club de opinión o un partido electoral que funcione cada 4 años", concluyó.