Al ser preguntada en una rueda de prensa, Rosa Díez juzgó "escandalosa la actitud del personaje", en alusión a Bangemann, pero agregó que lo más preocupante es el silencio de Aznar y la "confusión" con la que se han expresado hasta ahora el resto de miembros de su Gabinete.

En este sentido, subrayó que el ministro de Fomeno, Rafael Arias Salgado, ha pasado de las "alegrías" iniciales al silencio posterior, en el que demostró, a su juicio, que "no sabía cómo pronunciarse".

"Ya que se deja guiar por él, le diré que Tony Blair ha dicho que en su país no hubiera ocurrido", concluyó Rosa Díez, al tiempo que remachó: "Aznar está, como casi siempre, expectante".