"Ni el PSE va a notar mi ausencia ni tampoco yo voy a notar esa insuficiencia de no pertenecer a un partido político, porque mi militancia estaba ya en una situación de mnimos desde el mismo momento de la convergencia (de EE con el PSE)", afirmó.

Bandrés explicó que su decisión de pedir la baja en el PSE-EE se debe a la inserción de una foto suya en un periódico de Euskadi en el que pide el voto para el candidato del PSE-EE Mario Onaindía.

"Ha habido no un uso de mis frases, que estaba autorizado, sino un abuso de mi imagen y de mi firma, lo cual sobrepasa los límites de los razonable. He pedido la devolución de la estampilla de mi firma y, de paso, mi baja en elpartido, aunque seguiré defendiendo los valores que han inspirado nuestra vida política, la de Mario y la mía, a lo largo de tantos años", explicó Bandrés a RNE.

Agregó que "no me gusta lo que ha hecho gente del partido o gente del mismo en el 'caso Osakidetza', ni me gustan las críticas a los jueces o la política muy seguidista y muy subordinada al PNV que se hace actualmente. Hay críticas que a mí no se me han dejado especificar en ese cartel electoral. No me han dejado ser yo mismo y han secuestrad mi propia decisión, mis matizaciones".

FORMACION GOBIERNO

Sobre los resultados de las elecciones vascas celebradas ayer, Bandrés dijo que "en el PNV estarán contentos, pero preocupados, porque para ellos puede que se haya acabado la rutina de montar un nuevo gobierno con el PSE, en el cual ellos fueran preeminentes".

"Creo que los valores socialistas siguen siendo valores vivos y eso se regenerará, aunque tardará algún tiempo", dijo Bandrés, quien agregó que las recientes actuaciones del PSOE tienen un coste que pagar, que en Euskadi se ha pagado en el día de ayer".

También señaló que "el descenso en dos escaños de HB es una de las poquísimas satisfacciones que me dan estos resultados electorales".

Bandrés pronosticó como "complicado y difícil formar Gobierno" y afirmó que "habrá que ir al (pacto) tripartito, aunque no se qué es (el tripartito) ni quiénes son (los que lo formen)". Además, no ocultó su preferencia por IU para que forme nuevo Ejecutivo, junto a PNV y PSE.

Por últim, Juan María Bandrés no descartó que se puedan producir cambios en el liderazgo del PSE, "pero no por el resultado de las elecciones, sino por otras razones".

A su juicio, "hasta ahora, el gran problema del PSE era que el partido tenía implantación vasca y preocupaciones vascas, pero sus grandes dirigentes han tenido siempre su vista puesta en Madrid y su aspiración final era ser ministros del gobierno de Madrid, más que consejeros del gobierno vasco, lo cual le ha hecho ser un partido 'extranjero'". "No creo que por los resultados electorales puedan caer cabezas. Las cabezas tienen que caer por otras razones, por los 'Osakidetza' y por otras cosas", concluyó.