El CSB cuenta con 35 empleados, pendintes de recolocación, y se financia por aportaciones de los propios bancos privados, con el 0,3 por mil del capital y reservas de cada entidad financiera. La AEB desea su desaparicion por la falta de contenido de sus antiguas funciones consultivas y administrativas, que actualmente desempeña el Banco de España.

El Banco de España y el ministerio de Economía aceptan la necesidad de liquidar esta institución, a pesar de que no hace mucho tiempo el anterior secretario de Estado de Economía, Pedro Perez, laboró un plan que suponía la potenciación de este organismo.

La cuestión que ahora se debate es cómo dar continuidad a la elaboración de estadísticas que regularmente publicaba el CSB sobre balance y cuentas de resultados de cada uno de los bancos privados, así como el futuro del Colegio Universitario de Estudios Financieros y del Registro de Aceptaciones Impagadas.

AEB no desea asumir compromisos que le obliguen a aumentar su reducida plantilla, y resulta dificil pensar que el Banco de España vya a suplir estas estadísticas. Fuentes bien informadas aseguran que no sería coherente con la práctica del Banco de España, que no presenta nunca estadísticas aisladas de una sola entidad bancaria.

La disolución del CSB deberá producirse mediante una ley, puesto que fue creado por otra ley en 1946. Es previsible, sin embargo, que esta ley de disolución no vea la luz hasta que se hayan resuelto estos "flecos". Entre ellos está tambien el futuro del Cunef, escuela bancaria asociada al CSB y que absorbesegún algunas fuentes entre el 80 y 90 por cien de su presupuesto; así como el registro de impagados (RAI), que depende tambien del CSB.