Según el director de Inversión Internacional del Banco de China, Wu Jun, que es también el responsable de este nuevo fondo, con esta iniciativa pretenden incluir "la sostenibilidad del modelo empresarial, el gobierno corporativo, la estrategia corporativa y la actitud hacia la responsabilidad social" como un criterio de inversión.

"Es posible promover el comportamiento positivo y corporativo socialmente responsable y, al mismo tiempo, aumentar el valor del capital a largo plazo para los inversores", añadió Wu Jun.

Este paso va a permitir al país más poblado del mundo iniciarse en una aventura, ya vivida por Estados Unidos y Europa, en la que experimentará los beneficios de una inversión transparente, responsable con el medio ambiente y socialmente sostenible.

Robert Rubinstein, presidente y director general de TBLI Consulting, ha calculado que en el año 2031 China alcanzará unos niveles de consumo similares a los de Estados Unidos. En este sentido, Rubinstein consideró que es primordial conducir el crecimiento chino en un entorno de eficiencia energética y tecnologías y producción sostenibles.

"Una tecnología limpia y una inversión socialmente responsable serán absolutamente cruciales para el futuro desarrollo de China", concluyó Rubinstein.