Este resultado negativo se debió, sobre todo, a la aportación negativa de las balanzas comerciales y de rentas, que ascendieron a 408.000 millones y a 98.200 millones de pesetas, respectivamente, lo que contrarrestó los superávit del turismo (356.400 millones de pesetas) y de las transferencias corrientes (18.800 millones).

El deterioro del déficit comercial se debió a un incremento del 25% en las importaciones, que fue muy superior al crecimiento del 14% en las exportaciones. Los igresos por turismo subieron un 11%, mientras que el superávit de las transferencias es especialmente notable si se tiene en cuenta que el excedente en octubre de 1998 fue casi inexistente.

El superávit de la cuenta de capital fue de 129.900 millones de pesetas, el triple que en el mismo periodo del ejercicio anterior. La cuenta financiera, por su parte, tuvo un pequeño déficit de 23.000 millones de pesetas que contrasta con el superávit de 169.500 millones de pesetas de octubre de 1998.

En cuantoal periodo enero-octubre, la balanza de pagos tuvo un déficit de 1,037 billones de pesetas, cuando en el mismo periodo del ejercicio anterior tuvo excedentes de 261.100 millones de pesetas. Este resultado se debió, sobre todo, a los desequilibrios experimentados por las balanzas comercial y de rentas.