Aznar explicó, en su intervención de esta mañana, que el PP es un "gran partido nacional que forma parte de la gran corriente de centro reformista europea".

"Nunca he comprendido, y sigo sin comprender, esa idea del centro como final imposible de un viaje interminable", manifestó.

Afirmó que "nadie nos tiene que enseñar el camino del centro. No vamos al centro, estamos en el centro desde hace muchos años, como mínimo desde 1989, cuando refundamos el PP como un partido grande y abierto que buscó y obtuvo un respaldo mayoritario de los españoles y que gobernó España durante ocho años".

Por su parte, Rajoy, por la tarde, dijo que"necesitamos un partido fuerte" y añadió que "sin él, no se pueden ganar las elecciones".

"Deseo un partido unido y solidario, y con vocación de centro", dijo Rajoy, quien explicó que eso "quiere decir que no arrastramos doctrinas ni orejeras, que no tenemos ideas preconcebidas sobre las cosas, que huimos de cualquier radicalismo y que entendemos la acción política desde la moderación y la convivencia".

Aclaró que "esto no significa tibieza, indiferencia o relativismo" y explicó que "hay quien nos reprocha que el centrismo representa el vacío ideológico".

Afirmó que "no es una ideología ni una doctrina política, es una voluntar de evitar cualquier exageración" y dijo que "la mayoría de los españoles habitan este centro y en esta actitud de la moderación".

"Somos un partido de centro, moderado y cercano a la gente", concluyó,