En una entrevista en el periódico italiano "La Repubblica", Aznar asegura que los terroristas "deben ser combatidos y condnados" y que ante ellos "no hay que ceder ni un milímetro", mientras que los partidos nacionalistas "aunque no nos gustan, son legítimos".

Respecto a los resultados de la futura Cumbre de Niza (que pondrá fin a la presidencia francesa de la UE), el presidente del Gobierno confió en que sea "un éxito" porque tratará asuntos importantes como la posible firma de una Carta Europea de Derechos de los Ciudadanos.

En este sentido, Aznar insistió en el debate de pasar del actual modelo de unaminidad paralograr acuerdos entre los Quince a la mayoría cualificada. Se mostró convencido de que se podrán lograr acuerdos por mayoría cualificada, aunque prefirió que en asuntos como la fiscalidad, los fondos de cohesión, la inmigración o el asilo sean acordados por mayoría. "A fin de cuentas, Europa ha funcionado con unanimidad hasta ahora", dijo.

Aznar informa de que junto a su colega británico Tony Blair han remitido un escrito al presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, en el que le animan a "realiar reformas en el mercado de trabajo, en temas fiscales y en los sistemas de protección social" de los países de la Unión Europea, para garantizar la bonanza económica y la perpetuación del modelo de bienestar europeo.

Preguntado por el papel del centro-derecha en Europa, al ser el único gobernante de la UE con esta ideología, el jefe del Ejecutivo afirmó que "los populares europeos han dado siempre un impulso a la unidad europea, que es la política histórica de sus fundadores".

"Europa para nosoros no es una necesidad, es una vocación, una aspiración, una ambición. Esta es la vocación del Partido Popular Europeo", señala.