Aznar, que no va a valorar la sentencia del "caso Filesa", según informaron fuentes de la delegación española, sí ha aprovechado su reunión con los presidentes de las principales entidades bancarias niponas para vender las excelencias de las situación económica española, sobre todo informándoles que nuestro país ya es un socio destacado de la Unión Europea y que está sitado en la primera línea de la unión monetaria.

En este sentido, Aznar resaltó que la peseta es una moneda que ha resistido de forma "digna" los embates de la crisis de las bolsas. El presidente del Gobierno les dijo a los banqueros japoneses que, tras los 16 meses de gobierno popular, se ha hecho una política "sin secretos y llena de sentido común" en el ámbito económico. Además, les ha pedido que vuelvan a invertir en España, porque ya no existen trabas en la legislación laboral.

En este context, hay que recordar que estos bancos comenzaron a invertir en España hace veinte años, pero retiraron sus inversiones al encontrar demasiadas trabas y falta de flexibilidad laboral.

Durante su estancia en Japón, Aznar ha sido investido doctor "honoris causa" por la Universidad de Sofía de Tokio y ha realizado una visita a la sede de la multinacional Sony. Además, celebró el 20 aniversario de su boda cenando a solas con su esposa, Ana Botella.