AZNAR DICE QUE HAY QUE RECONOCER LOS MERITOS DE LA OTAN EN EUROPA

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente del Partido Popular (PP), José María Aznar, cree que "no se puede hablar de la seguridad europea actual, incluyendo el 'deshielo' democratizador del Este, sin enumerar los méritos de la OTAN y sin reconocer que la historia de la Alianza Atlántica es la de un éxito sin precedentes en los esquemas internacionales de seguridad".

En un artículo publicado en el ltimo número de "Veintiuno", revista de pensamiento de la Fundación Cánovas del Castillo, Aznar afirma que las decisiones sobre el futuro de Europa deben adoptarse con "cautela y realismo" y con un criterio "gradualista".

A su juicio, la consolidación de la Comunidad Europea es "un factor reconocido como esencial para la construcción de Europa", que requiere la máxima atención, con el fin de evitar que "la política comunitaria sea considerada como una política de supervivencia ante los cambios que estn transformando a Europa".

"No se trata de hacer experimentos para conseguir la mejor Europa posible", agrega, "sino de seguir con prudencia, pero con seguridad, el pulso de los ciudadanos".

Para Aznar, la consolidación de la CE y el proceso de identificación de los ciudadanos con el proyecto europeo "requieren la adopción de un 'criterio gradualista', exigiendo una progresión realista, coherente y equilibrada", y evitando "una cristalización definitiva de la fórmula política que ha de adoptar Euopa".

En su opinión, "el proyecto federalista es atractivo en la medida en que ofrece un fuerte condicionamiento a la burocracia centralizadora y, por otra parte, es una evidente garantía para que el 'principio de la subsidiariedad' sea operativo".

La Unión Económica y Monetaria es, según Aznar, un requisito para lograr la Unión Política, que requiere los siguientes pasos: existencia al final del periodo de una moneda única y una política monetaria común, instrumentada por un único e independient Banco Central Europeo.

En cuanto a la Unión Política, considera que la solidaridad europea debe basarse en una política social coherente con el objetivo de mejorar las condiciones de vida y de trabajo de todos los ciudadanos.

Sin embargo, recuerda que España rechaza el enfoque basado exclusivamente en la armonización de las condiciones de vida y trabajo de los ciudadanos de la CE y el deseo de imponer la armonización de los diferentes modelos de relaciones industriales.

A su juicio, la coheión social prevista en el Tratado de Roma sólo podrá alcanzarse si se realiza un esfuerzo decisivo para la superación de los desequilibrios regionales.

Por lo que se refiere a la política exterior europea, afirma que "sin una voluntad unitaria en lo político y lo defensivo, la CE no pasará de ser una importante confederación de intereses económicos, incapaz de cumplir con los objetivos de su creación ni de satisfacer las esperanzas de los estados miembros".

"Desde el punto de vista español", contnúa, "hablar de la construcción de Europa implica recordar el anacronismo histórico y político que significa Gibraltar, que, para España, es posible y razonable superar dentro de las actuales relaciones comunitarias".

En cuanto a la política de seguridad y defensa, el PP cree que "la Alianza sigue siendo el mejor sistema de seguridad europeo y atlántico".

Finalmente dice que aunque muchos países del Este quieran entrar en la CE, "es razonable que los países comunitarios pongan condiciones económias, políticas y democráticas para su adhesión".

(SERVIMEDIA)
30 Mayo 1992
CAA