El cuadro quedará colocado en la sala 14, dedicada a la pintura de Velázquez, y el Estado español ha pagado por él en el mercado internacional 23 millones de euros.

Algunos medios de comuniación han hablado de esta pieza como un trabajo de "segunda fila" de Velázquez, mientras que la gran mayoría de expertos y el director del Prado, Miguel Zugaza, sostienen que no hay ninguna duda de que se trata de una obra maestra del pintor sevillano y que el desembolso que ha hecho por ella el erario público está más que justificado.

Las voces críticas con la compra aseguran que la adquisición se debe al interés que ha mostrado por esta obra en alguna ocasión el propio José María Aznar. Sobre este aunto, Zugaza ha admitido que el jefe del Ejecutivo sí ha tenido "influencia".

Sea como fuere, "El barbero del Papa" constituye junto a "La Condesa de Chinchón", de Goya, adquirida en el año 2000, una de las piezas más importantes que han pasado a manos del Prado en los últimos años.