Los manifestantes, en su mayoría pertenecientes a la cooperativa de viviendas Paidemaco (promovida hace un decenio por el PSOE) acusan a Aparicio de ser el principal obstáculo para el esclarecimiento de las supuestas irregularidades detectadas en el estado de cuentas del conjunto residencial.

También recibió los pitidos y voces de militantesde IU y Partido Popular que se acercaron hasta las puertas del Ayuntamiento horas antes del inicio de la investidura.

Aparicio, que comentó cuando abandonaba el Ayuntamiento, "estoy muy emocionado", ha sido el alcalde de la ciudad desde que hace dieciséis años se constituyeran las corporaciones locales democráticas.

Salvo en la primera legislatura, Aparicio ha gozado siempre de mayoría absoluta, si bien en sus primeros cuatro años de gobierno municipal gozó de estabilidad como consecuencia del pato entre socialistas, comunistas y andalucistas.

El ex alcalde de la ciudad no asistió a la toma de posesión de la nueva corporación local de Málaga, a pesar de que ayer se aseguraba desde distintos ámbitos municipales que estaría presente en el salón de plenos del Ayuntamiento, a cuyas puertas se agolpó un nutrido grupo de personas, en su mayoría militantes de Izquierda Unida, que intentó asistir al acto protocolario.