La campaña, presentada hoy en un supermercado del distrito de Carabanchel, cuesta a las arcas municipales más de 36.000 euros y se complementa con la distribución de folletos dirigidos en especial a los jóvenes, según informó el consistorio.

"Aprendo jugando" es una de las 61 iniciativas que los responsables municipales han financiado en el presente año para ayudar a la dinamización del comercio de proximidad, para fomentar el asociacionismo y para la formación de este sector comercial.

La campaña pretende también transmitir a los jóvenes madrileños la importancia de las tiendas de barrio para conseguir una mayor calidad de vida de los vecinos. Además de poder comprar en un entorno inmediato y cercano, se establecen unos vínculos sociales y de afectividad entre los vendedores y los consumidores.

Con la puesta en marcha de este tipo de iniciativas, el Gobierno municipal refuerza su apuesta por el comercio de proximidad con la certeza de que "es y debe seguir siendo uno de los ejes fundamentales de la vida cotidiana de la ciudad".