Según informó hoy el vicealcalde, Manuel Cobo, tras la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid, las 369 viviendas protegidas en régimen de venta están situadas en los distritos de Usera, Carabanchel, Villaverde, Tetuán, Hortaleza, Vallecas Villa y Vicálvaro. Se trata de pisos de uno, dos, tres y cuatro dormitorios, cuyos precios oscilarán entre 75.000 euros y 160.000 euros aproximadamente.

Las 196 viviendas en régimen de alquiler, también de uno, dos, tres y cuatro dormitorios, están ubicadas en los distritos de Carabanchel, Usera, Centro, Hortaleza, Vallecas Villa y Villaverde; y la renta prevista para estas casas variará entre unos 293 euros y 668 euros.

El vicealcalde anunció, además, que a lo largo de este año se celebrará una segunda convocatoria de vivienda, tanto de venta como de alquiler, similar o superior a la presentada hoy.

Cobo explicó que el Consejo de Administración de la EMVS cerró el Registro Permanente de Solicitantes para las dos convocatorias presentadas hoy el pasado 18 de abril, de forma que podrán optar a estas viviendas de precio protegido los solicitantes que estén inscritos hasta esa fecha, que, según el vicealcalde, son un total de 21.596 personas.

A la pregunta de si no serían necesarios muchos más recursos para viviendas protegidas teniendo en cuenta el elevado número de demandantes de viviendas protegidas que hay y el escaso número de pisos que se ofertan, Cobo contestó que la consignación presupuestaria tiene un límite y que hay que tener en cuenta que es un esfuerzo que hacen los ciudadanos para los más desfavorecidos.

El Registro Permanente de Solicitantes comenzó a funcionar en enero de 2005 para facilitar la solicitud de vivienda protegida y evitar que en cada convocatoria los solicitantes tuvieran que acudir a la EMVS para formalizar su solicitud. Para inscribirse en este Registro, que está abierto permanentemente, hay que cumplir unos requisitos y existe un baremo para adjudicar las viviendas que facilita el acceso a las mismas a las familias más necesitadas y especialmente a los jóvenes.

En concreto, se prima a los jóvenes menores de 35 años, los que residen en domicilio paterno, los que residen en Madrid desde hace más tiempo, el número de miembros de la unidad familiar y los ingresos familiares. Además, muy especialmente, se valora a las personas víctimas de la violencia doméstica y a las personas con discapacidad.