Los problemas de tesorería y liquidez impideron al Ayuntamiento el pasado mes de septiembre hacer frente a sus obligaciones crediticias, lo que originó cierta alarma entre sus acreedores, puesto que la de Málaga fue la primera Corporación española que desatendió este tipo de pagos.

Con el cese de Gutiérrez y el posible nombramiento de Juan Dnis -ex director del área de Urbanismo- el Ayuntamiento pretende mejorar la gestión económica desde todos los aspectos, especialmente en el recaudatario.

Con la probable incorporación de Denis al área económica, el Ayuntamiento iniciará una nueva etapa encaminada a restringir al máximo los gastos, fomentar el ahorro y normalizar la vía ejecutiva para el cobro de apremios.

Asimismo, y en el apartado financiero, el Ayuntamiento de Málaga tratará de renegociar la deuda crediticia a largo plazo que mntiene con una veintena de entidades bancarias que alcanzan más de treinta y dos mil millones.

Además, el Ayuntamiento ha iniciado los trámites para refinanciar el crédito sindicado internacional de 3.500 millones de pesetas, del que el pasado mes de septiembre dejó de pagar una cuota de setecientos millones del principal.

El BBV, banco que actúa como agente del crédito sindicado, mantendrá la próxima semana una reunión con el resto de entidades, a fin de estudiar la solicitud de refinanciación. Los partidos políticos de la oposición municipal (PP, IU y PA) han mostrado su desconfianza ante tal operación porque temen que está basada en que, tras un impago, la petición puede volverse contra el Ayuntamiento.

Los portavoces de estas formaciones políticas han solicitado la dimisión del concejal de Economía y Hacienda, Hilario López Luna, si el Ayuntamiento no consigue la refinanciación de la deuda.