EL AYUNTAMIENTO DE MADRID EDITA UN DECALOGO DE NORMAS OLIGATORIAS EN LOS RESTAURANTES

MADRID
SERVIMEDIA

La Concejalía de Sanidad y Consumo del Ayuntamiento de Madrid, en colaboración con la Asociación Madrileña de Empresarios de Restaurantes (AMER), ha editado un folleto que, con el título "Decálogo del Restaurante", contiene 10 normas que deberán imperar en los restaurantes de la capital.

Esta iniciativa, que fue presentada hoy por el concejal de Sanidad y Consumo, Simón Viñals, y por el presidente de AMER, Ignacio Cabello, forma parte d las medidas puestas en marcha por el Ayuntamiento con vistas a la Capitalidad Europea de la Cultura de 1992.

Con ella, el Ayuntamiento de Madrid pretende que los restaurantes de la capital, unos 3.850, mantengan "el alto nivel de calidad y profesionalidad que ahora tienen".

"Además de que Madrid es cada día una ciudad más bella en la que se puede pasear, también se caracteriza por tener una amplia gama de restaurantes en los que se consumen los mejores y más selectos productos de España", resalt Viñals.

Explicó que algunas de las recomendaciones del decálogo tienen detrás el poder sancionador de la inspección de Sanidad y Consumo, por lo que deben ser observadas por todos los empresarios de restauración.

"Pretendemos ser corteses y educar, pero con estas normas también pretendemos avisar a los propietarios de los restaurantes", añadió el responsable de Sanidad y Consumo.

El decálogo abarca desde recomendaciones sobre cómo deben estar conservadas y presentadas las fachadas de los esablecimientos -"la primera impresión que reciben los clientes"- hasta el lugar y la forma en la que deben almacenar los propietarios de los restaurantes las basuras que generan sus negocios.

CALIDAD, CORTESIA E HIGIENE

Otras normas se refieren a la compra de los productos ofrecidos en los restaurantes, la calidad y forma de conservación de los alimentos, la cortesía en el trato a los clientes, la manipulación de los alimentos y la higiene de los aseos.

Sobre este último aspecto, una representane de la Asociación de Amas de Casa, que acudió a la presentación, sugirió al responsable municipal la introducción en la normativa de la obligatoriedad de adaptar los aseos a las personas con minusvalías físicas.

El resto de los consejos recogidos en el decálogo hacen referencia a la imagen y comportamiento de los trabajadores de este sector, la forma de presentación de la mesa -"que sea agradable a los ojos"- y los precios de los restaurantes, que, según el presidente de la AMER, deben ser un "justipecio" que se corresponda con el valor real de los alimentos.

Durante el debate que tuvo lugar al término del acto de presentación, algunos de los presentes mostraron su preocupación sobre el elevado precio de los restaurantes madrileños, que, según un estudio de la Unión de Bancos Suizos, son los más caros de Europa.

Ignacio Cabello rechazó las conclusiones de ese estudio, "ya que", dijo, "de los 3.850 restaurantes de Madrid, más de 3.000 están dando comidas diarias por debajo de las 1.000 peseta".

Añadió que en otros 600 los clientes pueden comer por debajo de las 5.000 pesetas, en otros establecimientos por debajo de las 7.000 y tan sólo en unos 20 el precio de la comida supera las 7.000 pesetas.

No obstante, Cabello justificó el posible encarecimiento de los restaurantes madrileños por la cada vez más extendida utilización de las tarjetas de crédito por los clientes, lo que supone para los restaurantes una merma del 33 por ciento en los beneficios, y por la falta de mano de obra especalizada en este sector.

(SERVIMEDIA)
13 Dic 1991
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