Las tres empresas, Antonio Lima Vega, Carlos Jaime Calvo Carrión y Rafael Calo Carrión, se dedican a la limpieza de bidones de otras 40 industrias, entre las que se encuentran Bayer y Basf, y posteriormente los vuelven a vender. Los residuos son depositados en una cisterna, según explicaron fuentes municipales de L'Hospitalet.

Las sustancias tóxicas se desprenden de la limpieza de los bidones. La inexistencia de depuradoras hace que los vertidos supongan un peligro, afirmó el consejero de Sanidad del Ayuntamiento de L'Hospitalet, Santiago Díaz, quien añadió que todas las aguasvertidas iban a parar al mar.

La Guardia Urbana de esta población tomó muestras del agua utilizada para limpiar los recipientes que usan las tres industrias con el fin de analizarlas. Posteriormente, el Ayuntamiento abrió expedientes a las tres empresas y puso el caso en conocimiento de la Fiscalía de Medio Ambiente de Barcelona.