La plaza de Santo Domingo, una de las más antiguas de Madrid, perdió su carácter como tal a finales de los años 50 debido a la construcción de un estacionamiento de vehículos de 567 plazas.

El proyecto, que cuenta con un presupuesto de seis millones de euros, pretende crear un eje peatonal que enlazará la Gran Vía, el Palacio de Oriente y el Teatro Real. El plan se suma a la peatonalización de la plaza de Callao, Preciados y un ramal de la Cuesta de Santo Domingo, así como a la transformación de la calle de Jacometrezo en una zona exclusiva de autobuses.