El hotel está situado en Magaluf y su estado es actualmente ruinoso. Ocupa un solar de 6.576 metros cuadrados, que se convertirán en zona verde. El coste será sufragado a partes iguales por el ayutamiento y el Ministerio de Comercio y Turismo.

El inmueble está hipotecado, por lo que parte del coste, 215 millones de pesetas, se abonaá directamente al Banco Santander, mientras que el resto se pagará a los propietarios, la sociedad Agrotel.

Esta es la segunda vez que la dinamita hace acto de presencia en el ayuntamiento socialista de Calviá en el último año. El último derribo se llevó a cabo en Palmanova, en el Hotel Playa de Palmanova, también en plena campaña electoral, en vísperas de las elecciones municipales y autonómicas. En cuestión de segundos, la goma dos convirtió en escombros el establecimiento.

La escena se repetir el sábado 17. Podría haber sido doble, porque al concurso público se habían presentado, además de los propietarios del hotel Atlantic, los del Hotel Tahití, situado en Palmanova. El ayuntamiento disponía ya de la partida económica necesaria, 80 millones, para adquirir el inmueble, pero finalmente no se han presentado los documentos necesarios para cumplir con el pliego de condiciones.