El proyecto de dicho aparcamiento se encuentra actualmente en manos de los técnicos de la Comunidad Autónoma de Madrid para su estudio y, según el expediente, contará con plazas suficientes pra albergar a todos los vehículos con más de 3.500 kilos de peso registrados en Alcobendas.

Entre las razones que han llevado al ayuntamiento a tomar esta iniciativa, según Antonio Pérez, concejal de Urbanismo, está la necesidad de dar más seguridad a la zona, "ya que los sitios donde estacionan los vehículos da carga pesada son refugio habitual de delincuentes".

Además, señaló que se pretende dejar espacio para que aparquen los coches particulares y evitar que las nuevas zonas verdes de la ciuda queden ocultas.

También indicó que el futuro aparcamiento contará con un servicio de transporte que lo comunique con el casco urbano, ya sea mediante una nueva línea de autobuses o con la extensión del recorrido de alguna de las que ya existen.

La explotación de este servicio será de forma indirecta, tal y como marca la ley, mediante una concesión de los derechos de gestión en concurso público. El aparcamiento estará ubicado cerca del actual depósito de gas butano de la carretera de Barajas.

El concejal explicó que el emplazamiento será de fácil acceso, ya que está previsto un desdoblamiento de esa carretera que permita una comunicación más ágil de la nacional I (Madrid-Burgos) con la N-II (Madrid-Barcelona) y el aeropuerto de Barajas.

El aparcamiento estará dotado de servicio de gasolinera, limpieza de vehículos, cafetería y restaurante para uso de los conductores de los camiones.