Esta acusación considera que los responsables de laCNMV no promovieron "intencionadamente" en su día la investigación de la supuesta apropiación indebida cometida por AVA o por la sociedad Socimer Limited International Bank, también imputada en este caso.

Al parecer, según los defensores de los afectados, la CNMV tenía conocimiento de las supuestas actuaciones delictivas de AVA "distrayendo el dinero de sus clientes al no poner a su nombre los títulos cuya adquisición encargaba", ya que dejaba el dinero en manos del banco Socimer, que al parecer tambin prestaba el dinero a terceras personas.

Según los datos de los afectados, la CNMV tuvo constancia de estos acontecimientos en septiembre de 1996, pero no informó a la fiscalía hasta el febrero de 1998, fecha en la que se inició la investigación.